Propone: Virginia
Comenta: José Antonio
Hubo un tiempo en que, como algunos les
gusta decir ahora, los franceses vivieron por encima de sus posibilidades. A
muchos tertulianos se les llenaba la boca diciendo que el país tenía un gasto
soclal desorbitado y empezaron a aplaudir los dichosos recortes, que ahora
sufrimos aquí en nuestras propias carnes. Estamos hablando de finales de los 90
y principios del siglo XXI en el vecino país galo. De cómo afectaban estos
recortes a las clases más desfavorecidas es de lo que nos hablaba la película
que nos trajo Virginia al cineclub, "Hoy empieza todo" de Betrand
Tavernier. Tavernier es un director comprometido con las causas sociales, cuyas
denuncias en la gran pantala han llegado a provocar reformas legislativas en
ese país. Un mérito que en España
supondría que los de la caspa te acusaran de ser de «los de la ceja».
La película nos
cuenta la historia del director de un colegio público en un barrio marginal de
un pueblo francés que un día se encuentra con que la madre de una alumna llega
borracha al centro, donde sufre un colapso y deja allí a su bebé y su hija de
cinco años. El sentido común dice que lo lógico en estas situaciones es tratar
de ayudar, no ya porque es tu trabajo, sino por humanidad. Asistimos a cómo el
sufrido director se va dando contra un muro, encontrándose con un muro formado
por funcionarios que no quieren más problemas. Los recursos de la
Administración son los que son y si no hay, pues no es su problema. Mientras
tanto, Tavernier nos muestra al político de turno sentado en su despacho,
aplicando recortes, ignorando que para lo que él son porcentajes, es algo que
tiene repercusiones directas en personas concretas. Y todo sin renunciar al coche oficial. Y
representante de un partido de izquierdas para más inri. El director acaba
convertido más en un asistente social que en personal docente. Es uno de estos
pequeños héroes cotidianos que intentan poner su granito de arena para intentar
que el mundo sea un lugar mejor. El director nos muestra una mirada hacia todos
aquellos que tienen que lidiar día a día contra la miseria y se convierten en
una molestia cuando ponen el dedo sobre las carencias del sistema. Otros desde
su atalaya proclaman solemnemente que el Estado de Bienestar está acabado.
Seguramente, aquellos que lo hacen, ni siquiera han visto esta película y es
posible que no sólo no se hayan planteado verla, sino que ni siquiera sepan que
exista. Pero la película es toda una referencia entre educadores sociales.
Podéis ver la película completa en Youtube
1 comentario:
La película refleja, a modo de genial crítica, la disociación entre Sociedad y Política, tan en boga últimamente.
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