lunes, 12 de diciembre de 2011

Coraline y el arañusco

Propone: Virginia
Comenta: Juli



En Alicia a través del Espejo, la protagonista viaja a un mundo imaginario atravesando un espejo, mientras que en Los mundos de Coraline lo hace a través de una mini-puerta tapiada que hay en la pared. Es clara la similitud de ambas historias: Coraline/Alicia en un mundo real que no le gusta y se encierra en fantasías evasivas con apariencia fantástica que pueden devenir en terribles. Además, si el autor quería dar más pistas sobre la semejanza de ambas historias, veáse el compañero de Coraline: un gato que aparece en cualquier momento.



A pesar de todo, nos encontramos aquí con una obra original y muy entretenida, rodada con muñecos "a lo antiguo", es decir con la técnica stop motion, o como se decía en España cuando estaba de moda utilizar esa técnica, fotograma a fotograma. Me encanta la riqueza del castellano.


La dirige Henry Selick, que ya dirigió la película Pesadilla antes de Navidad, producida por Tim Burton, y, al igual que Alicia en el País de las Maravillas, está basada en un libro, esta vez de Neil Gaiman, titulado Coraline.

En la película aparece una Coraline pre-adolescente agobiada por el cambio de domicilio de sus padres. No se adapta a la situación y el que sus padres vivan para trabajar no ayuda mucho. Es así como se adentra en su fantasía y cruza la puerta. Allí todo es idílico, con su otra madre, una encantadora mujer con botones en los ojos que le prepara un montón de tartas sabrosísimas que no engordan y está siempre pendiente de ella, su otro padre, que deja de lado el trabajo para acompañarla en sus juegos, en fin, encuentra un mundo como ella querría que fuese.


Pero el sueño se convierte en pesadilla cuando aparece un gato feo y se da cuenta de que su otra madre en realidad es un arañusco que atrapa a los niños en una telaraña y luego se come sus almas. Bueno, no se las come, pero las encierra en un sitio oscuro donde pasan la eternidad como fantasmas atrapados.


¡Me da miedo sólo de pensarlo! Los lúgubres escenarios cuasi góticos consiguen intensificar la atmósfera de terror de la película.

Podría comenzar aquí un debate filosófico tan de moda últimamente en este blog con reflexiones acerca de qué es real y qué no, interpretaciones de los sueños, y todas esas filosofadas de pijama y zapatillas de felpa a la que últimamente estamos tan acostumbrados. Os invito a que lo hagáis.



13 comentarios:

Rubén dijo...

Hoy me he levantado psyco-monster...
¿Por qué pensáis que las arañas son tan recurrentes en el mundo del miedo (véase IT)? ¿Qué miedo atávico tenemos con esos bichos?

JULI dijo...

¡Cómo se nota que a ti no te ha picado una araña!
A mi, en la adolescencia, me picó una en brazo, y se me hinchó de manera que parecía el brazo de Popeye.
Y para los mal pensados, era el brazo izquierdo.

Rubén dijo...

A mí me dan pavor las arañas, que conste.
No recuerdo que me haya picado una, pero porque cada vez que las veo, me voy en sentido contrario.

J. Antonio dijo...

A mi me picó una, en la etapa en la que fui Spiderman y tal.
Pero como creo que hablar de arañas no va a generar debate, sobre Henry Sellick diré que es un gran director cuando trabaja con otros de los grandes pero sus resultados son más discretos en los proyectos que ha tenido en solitario. En Pesadilla antes de Navidad tenía detrás a Tim Burton y a Danny Elfman en la banda sonora. En Coraline parte de un libro de Neil Gaiman, uno de los guionistas más interesantes del mundillo comiquero. En cambio, su proyecto en solitario fue James y el melocotón gigante, una peli de la que ya casi no me acuerdo de nada y que fue un estrepitoso fracaso.

Rubén dijo...

Pero "James y el melocotón gigante" también está basado en un libro homónino (que no recordaba el autor pero la Wikipedia me ha dicho que es Roald Dahl), por tanto el origen del fracaso haya que buscarlo en otro sitio. Quizá la historia no calase tanto.

Rubén dijo...

Siguiendo la invitación de Julián, y una vez ataviado con las zapatillas de felpa y la bata de satén, me gustaría indicar aquello que dijo Nietzsche sobre el dualismo ontológico. Más o menos dijo que Sócrates, Platón y todos aquellos que se habían inventado otro mundo eran unos cobardes y de ahí la necesidad de crearse otro mundo donde sentirse bien, pues no aceptaban esta vida como tal.
Yo creo que cuando es la imaginación la que duplica mundos, se debe hacer una excepción a la doctrina nietzschana (o cómo se escriba).
Supongo que Esther podrá orientarnos un poco mejor sobre esto.

Anónimo dijo...

Jo, sabéis un montón de cosas ¿no?
Que envidia! (de la sana eh? :D)

Me encanta esta peli! ;D

Saludos.
Maika.

J. Antonio dijo...

Vaya, se me había pasado que era un cuento de Roald Dahl. Yo que esperaba picar para que se montara una polémica con mogollón de comentarios y me jodes el argumento. Sobre lo del rollo filosófico me espero a que hagan la versión en dibujos a ver si así me entero de algo de lo que has dicho.

Rubén dijo...

Vala, lo lamento. No era mi intención desvelar intrigas.
Pero es que yo me leí a "James y el melocotón gigante", por eso sabía que era un libro.

Anónimo dijo...

El mismo equipo de produccion de esta pelicula y tienen preparada otra para el año que viene que tematica parecida.
La cosa puede ser interesante.

http://www.imdb.com/title/tt1623288/

JULI dijo...

Vaya, veo que hay dos post seguidos con múltiples comentarios acerca de monstruos en el cine. Se habla de vampiros, zombies, hombres-lobo, arañas y hasta melocotones!
Tendré que buscar algún monstruo alternativo para la peli de esta noche (y que no sean Los Tomates Asesinos, que me suben el ácido úrico).

Rubén dijo...

Del pobre Franckenstein no se dice nada. Siempre fue un poco marginado.

JULI dijo...

Mi monstruo va a ser el peor posible de las películas de terror.