Propone: Virginia
Comenta: José Antonio
Cuando Virginia nos trajo al Cineclub "Once", yo todavía andaba conmocionado por haber vuelto a revisitar "Vértigo". La película de Hitchcock es uno de esos clásicos que a cada visionado gana más y en el que siempre se ven cosas nuevas. Así que como resultado de esa impresión no dejaba de ver cosas comunes entre ambas pelis, a pesar de que son obras que no tienen nada que ver la una con la otra. Por ello, he decidido poner en este comentario algunas de las pajas mentales que me hice cuando terminé de verla. Habrá quien esté de acuerdo con lo que diga, otros que no, pero por lo menos nos evitamos hacer el típico texto con todos los topicazos y lugares comunes. De todas maneras, como algunas cosas son inevitables, vamos a dar los datos de rigor. "Once" es una película irlandesa del año 2006. Se trata de un musical intimista y con una banda sonora intensa, que atrapa y que deja muy buen sabor de boca. No hay grandes estrellas, ni coreografías espectaculares. Sólo buena música, de la que sale de dentro del corazón.
Glen Hansrad es un músico callejero que también trabaja ayudando a su padre en una tienda de reparación de aspiradoras. En las calles de Dublin canta sus versiones de temas conocidos, pero por las noches y a solas le gusta tocar sus propias canciones en las que habla de la chica que perdió y que se ha ido a vivir a Londres. Pronto conoce a Marketa, una inmigrante checa, madre soltera, que vende flores en la calle, a la que también le gusta hacer sus pinitos en la música y que se convierte en su mayor fan. Entre ambos surge el proyecto común de unir sus talentos para grabar un disco y con el que él pueda reconquistarla gracias a la fuerza de sus canciones. En el proceso creativo, se despertará entre ellos la chispa del amor.
No voy a contar el argumento de "Vértigo" porque no es la peli que toca, pero sí diré que es la historia de un hombre que se enamora de una persona que no existe. Pero la pregunta es ¿ama realmente el personaje de James a Stewart a Kim Novak? ¿Cuánto de lo que él ama es real, o es una idealización de cómo espera que sea la otra persona? Interesantes cuestiones ¿no? Pues ya llegamos al punto en común con "Once". ¿Está realmente enamorados Glen y Marketa, o simplemente aman de la idea de querer a otro y sufrir por él? La tristeza y la infelicidad que les dan estos sentimientos son precisamente el motor que les hace funcionar creativamente. Mientras Glen y Marketa sigan siendo infelices, tendrán acceso a las musas que les inspiran para crear su arte. Cuando acaba la peli, todo parece que Glenn va a recuperar a su chica, pero ha acabado enamorándose de otra. La semilla de la infelicidad persiste y por tanto ambos pueden seguir creando música. ¿Será verdad eso de que cuanto más atormentado esté el artista, mejor será su obra?
La banda sonora de "Vértigo" también es muy buena pero salvo eso, no tiene nada en común con la de "Once". ¿Alguien se atreve a hacer las comparaciones? Por cierto la canciñon "Falling slowly" ganó el Oscar a la Mejor Canción. Y eso es todo. Comentad, malditos.
11 comentarios:
Virginia, a ver si me dejas la peli, que yo no estuve el día de su proyección y por tanto, es como si yo hubiera sido de la ONCE al no poder verla (ni tampoco oírla). Eso me hace relacionar esta película con la de No me chilles que no te veo, jejeje, que el otro día echaban por la Sexta3 y que tuve la oportunidad de ver un rato.
Ahora en serio, leyendo el comentario me han entrado ganas de ver la película. La de Once, por supuesto.
Si te gustó ONCE, no te pierdas DOCE...jajaja pienso repetir el chiste hasta que os haga gracia cabrones!
Ahora en serio, el comentario me ha encantado, parece de los míos en el intento de relacionar cosas alejadas, pero tú sales más airoso que yo!
Sólo diré una cosita, y la dirán por mí...
http://youtu.be/GW4kQh4mgKc
Respecto al chiste, haré otro chiste fácil yo: Muy bien Pepe, así me gusta que te mantengas en tus TRECE.
Respecto al vídeo, eso es un screener y lo demás son tonterías.
Julián, ¿cuántas pelis de este ciclo te has perdido?
Hola, soy Ángel Castillo del blog Cine con Papas. Os felicito por el gran trabajo que estáis realizando con vuestro blog. A partir de ahora lo seguiré más de cerca. Un saludo.
Muchas gracias, Ángel, ahora también estáis en nuestro blogroll. Quid pro quo
Muy chuli,Jose.Me encanta tu conclusión
Juli,el día que te vea el pelo (jeje) te la paso.
Por cierto,soy la socia número 13
Cuando leí que José Antonio, autor del comentario, había vuelto a revisitar Vértigo decidí avergonzado que ya no podía esperar más a verla entera. Había llegado a ver más o menos la mitad --la tenía grabada en una cinta VHS pero ahora con el vídeo roto tenía que encontrar una alternativa. El esfuerzo, claro, ha merecido la pena. Creo que era Mel Brooks quien decía que ver una película de Hitchcock suponía dos horas de paraíso, y "Vértigo" no decepciona. Diría que es una película redonda (estructuralmente), riquísima en detalles, de casi impecable factura --uno no se imagina cómo se podrían rodar mejor ciertos planos. Ahora bien, tengo que confesar que a lo mejor a mí no se me habría quedado en la cabeza como "obra maestra", aunque esta calificación es (siempre para mí) extremadamente dudosa, o más bien pomposa. Si a veces (más bien pocas) una película consigue cierto vuelo poético, no es a base de virtuosismos ni alardes.
Pero ya estoy divagando otra vez. A lo mejor algún día toca hablar un poco más de "Vértigo", por ejemplo, a propósito de "Mulholland Drive", película que ha sido también relacionada con ella y que parece ser que ya se ha visionado tiempo ha en las sesiones del cineclub y cuyo comentario sigue aún, por lo demás, pendiente. Esto al margen.
No voy a destripar "Once", aunque supongo que por la misma naturaleza del blog los llamados "spoilers" están permitidos (más me vale, porque con "El inadaptado" sólo me faltó transcribir los diálogos). Mi primera impresión sobre la película es que era corta, lo que normalmente suele ser un elogio. Pero, no sé si estaréis de acuerdo conmigo, a mí me pareció un poco apresurada: las cosas se van precipitando como en un telefilm. Quizá ésa sea la intención, dar la impresión de algo muy fugaz que ocurrió "once upon a time". Confieso que el final me sorprendió, estaba esperando que todo terminara de otra forma digamos más convencional, tal y como la sucesión de acontecimientos parecía apuntar.
La realización impecable, cámara en mano cuando era necesario, aporta credibilidad. Tampoco era tan fácil, con tantos ingredientes que se mueven en el límite de lo dramático y lo sensiblero (sin transpasarlo). Entre ellos la omnipresente música, muy emocional, con su punto desgarrado, aunque a veces no todo lo que sale del corazón lo es. No digo que sea mala ni nada parecido, sólo que es casi otro protagonista. Por cierto, volviendo a divagar un poco, en "Vértigo" sucede otro tanto --aunque la música no "esté" en la película. Bernard Herrmann, el autor de la partitura (y notable director de orquesta), estaba tan infatuado de su trabajo que llegó a afirmar que esa película se quedaba en nada sin su música (la de Herrmann). Esta declaración provocó, comprensiblemente, ciertas tensiones con Hitchcock.
En fin, volviendo a "Once", decía que yo me quedé con ganas de más (*), y quizá eso es lo que la película pretendía, aunque sigo teniendo la impresión de que le falta algo (o puede ser que le sobre). Destacaría dos momentos: uno casi humorístico, cuando Glen propone a Marketa que lo acompañe a Londres haciendo grandes planes: ese entusiasmo cede (verosímilmente) ante la sola mención de cierto personaje, i.e., la madre de Marketa. Y otro, que a lo mejor era innecesario incluir, cuando después de la grabación paran el coche y se ponen a jugar en la playa; quizá algunos carajillos (o tés) en el pub hubieran aportado más realismo.
Seguiremos por aquí, comentar las cosas ayuda a disfrutar del cine. ¡Que no decaiga!
Hasta pronto.
(*) ¿de doce?
Pues para mi vértigo quedó en mi memoria como una obra maestra fascinante desde el momento en que la vi, de adolescente, en un ciclo que pusieron de todo Hitchcock en la 2. Quizás con aquellas películas me convertí en un cinéfilo, así que les tengo un cariño especial.
En cuanto a Once no deja de ser una peliculilla chiquitita pero encantadora, y sí, coincido contigo es que su mejor baza es la verosimilitud, vayan a la playa o al pub.
Además, la vimos casualmente después de pasar un fin de semana en Dublín, con la gracia añadida de ir descubriendo los escenarios.
Reconozco que mis razones hoy no son en absoluto objetivas (para ninguna de las dos películas), ¿pero acaso lo son alguna vez?
Ahí lo dejo
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