miércoles, 5 de mayo de 2010

A polemizar!

Dada la escasa acogida de los dos últimos post publicados en este presunto cinefórum, batiendo los récords negativos de comentarios, he decidido dar un nuevo enfoque en esta nueva entrada que, amigo lector, estás leyendo.
Y, ¿qué película he escogido para ello?
Te toca, Virginia, hablaremos de Tideland.

Propone: Virginia
Comenta: Juli


La verdad es que esta obra de Terry Gillian, que vimos en un escenario distinto al habitual en los Golfa, es una obra bastante interesante. Te puede gustar o no gustar, pero no te dejará indeferente.

A Jeff Bridges le gusta hacer ese tipo de personajes marginales como "el Nota" de El Gran Leboswki, y es precisamente ese tipo de papeles los que suele bordar. En Tideland lo tenemos de yonqui fracasado y soñador padre de una niña, Jeliza-Rose, que representa una Alicia posmoderna en el país de las Maravillas en 2D, que en vez de sombrereros, conejos y demás fauna habladora, tiene cabezas de muñecas con las que vive en su mundo de fantasía. Un mundo que no es sino una evasión a su día a día con unos padres que jamás debieron obtener el carnet de paternidad, y que viven su realidad con las drogas con una naturalidad que llega al extremo de enseñarle a su propia hija a suministrarles la droga para sus "viajes". Porque su madre también es yonqui, la sorprendentemente nada sexy Jennifer Tilly, y eso que sale con un salto de cama que en cualquier otro momento resaltaría su voluptuosidad.


La película es la historia de la niña, que interpreta Jodelle Ferland. En su realidad vive con sus padres politoxicómanos, y ante la muerte de su madre, huye con el padre a la casa de su difunta abuela. Después una sobredosis de este hace que se quede huérfana del todo, aunque en su fantasía, ella cree que su papá sigue en su "viaje".
"Viaje": 7. m. jerg. Estado resultante de haberse administrado una droga alucinógena. (diccionario de la R.A.E.)
En la destartalada mansión familiar la niña juega con sus cabezas-muñeca y fantasea con sus vecinos, a los que les falta un herbor.
Ahora que lo pienso, en esta película hay más locos que en Alguien voló sobre el Nido del cuco, pero aquí no creo que nadie se cuestione la bondad o maldad de los personajes. Incluso, diría que el procentaje de locos es el más alto de todas las películas de Terry Gillian, pues aquí se llega al ciento por cien.


Moraleja: si eres un puto drogadicto, lo mejor es que te esterilicen antes de tener niños con una asquerosa yonqui, porque si no es así, vuestros descendientes estarán zumbados ya desde pequeñitos.

8 comentarios:

anónimo joputa dijo...

Para dos pelis buenas que colgais y nadie comenta nada...

hopyxi seguro que significa algo guarro, no?

Esther dijo...

Pobre niña... Estos comentarios tuyos, Juli, tienen el objetivo de hacernos ver la peli para comprobar que nunca puede ser tan mala, verdad? :))))
...una manera un poco enrevesada de fomentar el gusto por el cine, ya te voy cogiendo...

Esther dijo...

Creo que Cyrulnik y su resiliencia tendrían mucho que decir de esta peli... (prox. tema de Imagin-a, jeje)

JULI dijo...

Uy! Si no digo que la peli es mala! Es más, hasta pongo que es interesante, que lo es.
La verdad es que me gustó. Es bastante dura, y en muchos momentos te puede dejar mal sabor de boca, pero merece la pena verla.

Pepe dijo...

Yo creo que el comentario es un elogio! Y estoy bastante de acuerdo además: el tema de la locura es recurrente en Terry Giliam, como el de la imaginación que entra en la realidad y la transforma, es decir, el viejo proverbio que dice que todo depende del color del cristal con que se mira. La referencia a Alicia no es casual, más ahora que Burton ha estado tan anodino.

Viva Giliam y viva Juli! Y viava anonimo joputa, que es el único que anima un poco el cotarro. Eres la belén esteban del cinegolfa!

JULI dijo...

Pepe, con lo bien que te salen los comentarios, nos tienes casi huérfanos de tu sabiduría cinefila, con tus comentarios con cuentagotas. ¡Anímate, abre el grifo e inúndanos con ellos!

Pepe dijo...

Es verdad, Juli, que tenemos a tus pelis huérfanas de comentador. Jose Antonio también nos tiene abandonados, gracias a Dios tú estás tan fecundo como siempre.

Esta claro que mi pecado capital es la pereza. A ver si me pongo con alguna de una vez. Con alguna peli, quiero decir.

JULI dijo...

No te creas, a mi también me da pereza.
Y lo de las pelis también.