sábado, 9 de enero de 2010

El oeste ya no es lo que era

Propone: Juli
Comenta: Jose Antonio


Un Yojimbo es un samurai que vende sus servicios al mejor postor. Con semejante definición vemos que nuestro protagonista no es el clásico héroe de las películas de vaqueros. Hablamos, cómo no, de “Por un puñado de dólares”, película que nos trajo Julián a los Golfa. Protagonizada por Clint Eastwood y dirigida por Sergio Leone es una adaptación de Yojimbo de Akira Kurosawa.
En la película japonesa, a una aldea en la que dos familias luchan por el control del territorio llega un samurai ofreciendo su talento a los dos clanes rivales. La acción en esta versión se traslada al oeste, donde el samurai es un pistolero encarnado por Clint Eastwood. Uno de los clanes de la ciudad comercia con armas, el otro con alcohol. Las pistolas de Eastwood pueden decantar el transcurso de la guerra a favor de un bando o del otro, en función del que apoye. Dicen que el guión se escribió en apenas dos semanas, aunque no es de extrañar ya que sigue muy fielmente la historia de su predecesora. Tan fielmente que Kurosawa les llevó a los tribunales exigiendo el pago de los derechos de autor. Y Leone además perdió el pleito y tuvo que pagar.. Si hubiera sido Dersu Uzala, nuestros protagonistas hubieran encontrado a un abuelete que les enseñaría las maravillas de vivir en los bosques de Canadá. Pero aquí la acción se traslada al lejano oeste.

Sin embargo, sería injusto considerar esta película como una mera copia, porque no se limita a copiar, hasta el punto de que contribuyó a abrir nuevos caminos a un género como es el western. Películas como ésta y las de Peckínpah mostrarom un salvaje oeste que ya no era el lugar idílico donde vivir aventuras. Sucio, peligroso y unos héroes y unos villanos que no lo eran tanto.
Nada más empezar “Por un puñado de dólares” vemos cómo un niño es golpeado mientras el “héroe” bebe agua impasible en un pozo sin mover un dedo para defenderlo.
El implacable pistolero que interpreta Eastwood es una persona que no tiene conciencia ni principios. Juega con los dos bandos y sólo intenta sacar su propio provecho. Dado que los dos clanes rivales no son unos angelitos, le redime el hecho de que les manipule de una manera tan descarada. Finalmente, Eastwood acabará librando al pueblo de la tiranía que les oprime, como un ángel exterminador, haciendo que el cementerio se les quede pequeño.
Hay que destacar la música de Ennio Morriconne que es una seña tan identificativa de este tipo de películas como la presencia de Eastwood con su poncho, su barba de cuatro días y los escupitajos del tabaco de mascar. De todas maneras, he de reconocer que el tema principal que suena en los psicodélicos títulos de crédito era una de las partituras que menos conocía de este compositor.


“Por un puñado de dólares” inauguró el spaghetti western y abre lo que se le ha dado en llamar La trilogía del dólar, que no es que sea una saga que continúe sino que son películas del oeste dirigidas por Leone y protagonizadas por Clint Eastwood.
En cuanto a Yojimbo, tuvo una tercera versión más en los años 90 dirigida por Walter Hill y protagonizada por Bruce Willis. La acción se trasladaba a la guerra entre bandas de gángsters en los años 30. Esta vez sí se pagaron los derechos de autor.

3 comentarios:

JULI dijo...

Pues la del Sr Willis la he visto y no me parecio gran cosa, pero tengo curiosidad por ver Yojimbo.
Sobre esta pelicula en particular tengo que decir que me encantan TODOS los westerns de Clint Eastwood, y escogi este ademas por la nota de excelente calidad que supuso la irrupcion de Sergio Leone en el spagueti western.
Ah, y una nota sobre el famoso poncho que viste en su trilogia leonina (Por un puñado de dolares, La muerte tenia un precio y El bueno, el feo y el malo): lo compro el propio Clint, quiza en un mercadillo de Almeria, donde se rodaron las 3.

J. Antonio dijo...

Pues mi wesern favorito del Leone es precisamente en el que no sale Eastwood: Hasta que llegó su hora. Eso sí, son casi cuatro horas de peli.

JULI dijo...

Ah! El de Charles Bronson! Buenisimo.
Al Leone le gustaban hacer pelis largas cuando tenia presupuesto, y ademas las hacia bien. Creo recordar que Hasta que llego su hora (cuyo titulo original se traduce por Erase una vez en el Oeste) son unas 3 horas. La que son 4 es la de Erase una vez en America.
Gran comentario, Jose Antonio.